Por: Claudia Ramírez
4b contabilidad
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Para comenzar, todos sabemos que nuestra manera de pensar, de actuar, de hacer las cosas, de tomar decisiones en el momento preciso y la forma de comportarnos frente a determinadas situaciones, influyen mucho a la hora de catalogarnos como persona. En la sociedad actual se toman mucho en cuenta estos parámetros, ya, que hoy por hoy es fundamental que cada palabra que salga de nuestra boca y cada acto que fluya de nuestro ser, tenga valor y sentido común. Del mismo modo, una de las cosas más importantes en un ser humano es el grado de importancia que éste ponga en su palabra, pues, muchas veces con una palabra basta, para hacer que alguien confíe en nosotros, sólo, que por falta de principios ésta podría quedar devaluada. Por otro lado, un gran número de situaciones y problemas que han estado afectando el país en los últimos años, se derivan de ésta problemática, un ejemplo real y conciso de esto lo podemos encontrar en La guagua: realidad social de la población dominicana.
Actualmente la República Dominicana se encuentra en una situación social y política muy crítica, debido a la inmoralidad de nuestros gobernantes, que sólo piensan en lo que es mejor para ellos, y no en lo que es mejor para el pueblo, que a fin de cuentas terminará siendo el más afectado. Todo este embrollo se complica más cuando por negligencia y ambición no se toman las decisiones adecuadas, que si se hubiesen tomado correctamente podían haber sacado al país del ollo y llevarlo a las vías del desarrollo. No conforme a esto, las autoridades dominicanas, en conjunto con el gobierno dominicano, aseguran que el país marcha muy bien, que todo está controlado y que la población no debe alarmarse, pues, ellos pueden controlar todo perfectamente como lo han hecho, según ellos, siempre, aunque la realidad es otra totalmente diferente. Esta condición tiene a la población muy desconcertada e intranquila, pues, se está viendo un retroceso agudo en la nación, y las autoridades correspondientes no hacen nada por resolverlo, ya, que ellos no tienen ningún tipo de inconveniente ni nada que perder, porque, viven en un mundo completamente alejado de la realidad.
Las causas que han llevado al país a estas circunstancias son la falta de inteligencia, la irresponsabilidad, la ausencia de sensibilidad y el egoísmo que poseen los representantes del país, que evaden sus responsabilidades con unos pesitos que dan cuando están en campaña electoral y con promesas que jamás cumplirán. A pesar de todo esto, la población esta ciega, pues no ve que son ilusiones falsas que nunca se llevarán a cabo y en cierto modo, se dejan convencer por los convincentes discursos de campaña que frecuentemente ofrecen los muy desesperados postulados que quieren obtener un codiciado puesto en el gobierno. A todo esto, se suma el interés que cada uno tiene por conseguir lo necesario para cuando ya no tenga uno de esos cargos, no preocuparse por que le falta algo para subsistir, sino que está seguro de que vivirá cómodamente, mientras la sociedad se sigue cayendo a pedazos, sin que por lo menos un alma se apiade de nuestra mal administrada nación. Por supuesto, sobran quienes desean ayudar a la desamparada ciudad, pero, que no tienen los recursos suficientes para luchar contra los altos funcionarios que con cada día que pasa se están adueñando de ésta parte de la isla.
Otros factores que se le agregan a nuestra escalofriante realidad son la corrupción y la criminalidad que arropa a República Dominicana, haciendo de ésta forma, aún más difícil transitar por las calles de Santo Domingo que encima, no están siendo cuidadas como deberían. También podemos mencionar el alza de los precios en más de un 95% de los productos alimenticios, de las prendas de vestir y de los materiales de constucción, que son básicos para la vida diaria. Por otra parte, tenemos el dilema con la educación que es lo más importante para el crecimiento, en todos los sentidos, de un país, y que en este país se le da tan poca importancia, digo esto, porque el gobierno dominicano "no tiene dinero" para resolver problemas que se presentan en las escuelas dominicanas ni para proporcionar a los estudiantes una educación digna y un desayuno escolar de calidad, en cambio, para fiestas, viajes y demás, si tiene dinero. Incluso, podemos ver como se hacen "los chivos locos" con el dinero incautado a narcotráficantes y otras organizaciones, y con el dinero que por ley le corresponde a la educación (4%), utilizándolo en cosas innecesarias, como un metro, por eso, es que encontramos tantas manifestaciones exigiendo cosas que nos prometieron hacer o cumplir, y que todavía esperamos, que se ejecuten, un ejemplo de esas protestas es la canción "La guagua", de Juan Luis Guerra.
En conclusión, la República Dominicana es un país súbdesarrollado, en el que sus habitantes deben de luchar para lograr su desarrollo, pero, que para esto necesita el apoyo, la disposición y el interés por mejorar de las autoridades, que en lugar de mirar con malos ojos ésta acción, deben de cumplir con su trabajo con honestidad y lealtad a la patria. A pesar de todo, somos un pueblo unido y consciente que con un poco de disciplina, ley y orden haremos grandes cosas por nuestra queridísima Quisqueya La bella. Por ende, debemos cuidar lo nuestro, luchar porque, se cumplan las leyes,las promesas hechas y que nuestros derechos y deberes sean respetados, asimismo, como la libertad de expresión y la libertad de prensa que el Estado nos dio como derecho. Así pues, si es necesario luchar, porque el gobierno dominicano cumpla con todas las promesas hechas, debemos hacerlo de la manera más pacífica posible, pero, siempre hacerlo, tal como nos enseña Juan Luis Guerra, con La guagua: realidad social de la población dominicana.